Pediculosis en la infancia
Comité de Dermatología

La pediculosis en niños es la causa más frecuente de picazón en la cabeza y en la parte superior del tronco. Afecta por igual a niños y niñas y se da principalmente en pacientes que presentan el cabello largo. La población más afectada es la que presenta edades entre 4 y 14 años.

El agente que produce esta afección es el piojo humano (pediuculus capitis). El piojo humano adulto es de color blanco grisáceo; la hembra mide 4 mm y el macho entre 2 y 3 mm. El piojo reside en el cuero cabelludo y se alimenta de sangre humana, la que succiona cuatro veces por día. Posee tres pares de patas con ganchos que le permiten prenderse del cabello. Si bien la mordedura no lastima, existe en la saliva excretada una sustancia que causa reacciones por sensibilización.

El piojo vive 30-40 días. La hembra puede poner cerca de 200 huevos o liendres. Cada huevo se transforma en piojo adulto en un tiempo de ocho días. Los huevos son colocados en el nacimiento de los cabellos y se adhieren por una sustancia cementante; son pequeños, ovales y de color amarillento y miden 0,5 mm. Aquellas liendres que están a más de 5 mm del cuero cabelludo son de color blanco y ya están vacías.

El contagio se realiza en forma directa de cabeza a cabeza del niño con piojos, o de manera indirecta a través de peines, cepillos, gorros, ropas, sábanas, areneros, colchonetas, etc. Contrariamente a lo que se cree, el piojo puede sobrevivir fuera del contacto con la piel más de un día, con lo cual se multiplica la posibilidad de contagio indirecto.

PREVENCION DE LA PEDICULOSIS
 

  • Evitar el uso de gorros, peines o cepillos de personas con pediculosis.
  • Los peines o cepillos con piojos o liendres deberán ser introducidos en agua caliente durante 10 minutos.
  • Las sábanas y toallas deben ser lavados con agua caliente y planchados.
  • No existe tratamiento con shampú o loción que pueda prevenir la pediculosis.
  • Evitar el uso de areneros.
  • Uso de gorra de baño en piletas de natación.

  • La HIGIENE DIARIA y el CONTROL FAMILIAR es lo más importante.

    A continuación se detalla el tratamiento según las normas del Consenso de Pediculosis del Comité de Dermatología Pediátrica de la Sociedad Argentina de Pediatría, año 1999.
     

    TRATAMIENTO
    Tratamiento antiparasitario

    Local
    Manual:  Esta técnica permite la extracción manual de piojos y liendres por medio del peine fino metálico. Se debe pasar desde la raíz del cabello hasta la punta. Es inocuo, económico y no crea resistencia. Debería utilizarse diariamente previa colocación de crema enjuague.

    Químico:

  • Piretrinas: son plaguicidas de amplio espectro, poco contaminantes del medio y poco tóxicas. La permetrina al 1 % en nuestra experiencia no ha demostrado la efectividad relatada. Se recomienda la permetrina en loción al 2.75%; se debe colocar dos veces por semana, dejándola actuar 10 minutos para luego enjuagar.
  • Organoclorados: el único compuesto que se utiliza es el lindano al 1 % en shampú o loción; se aconseja su uso una vez por semana dejándolo actuar 5 minutos, para luego enjuagar. Para evitar efectos colaterales, el cuero cabelludo no tiene que presentar lesiones fisuradas (heridas, etc.)
  • Organofosforados: el malathion se prescribe al 0.5 % en vehículo alcohólico. Su aplicación es semanal y se debe mantener colocado un tiempo mínimo de 8 horas.
  • Butóxido de piperonilo y benzoato de bencilo: se asocian con piretrinas, observándose, en algunos casos, resistencia.
  • Cuasia: se extrae de un arbusto del norte del país. Se duda de su efecto pediculicida per se, ya que el vehículo de la cuasia sería una solución alcohólica, siendo esta última la responsable de la actividad pediculicida.
  • Alcohol de madera: su uso provoca irritación cutánea.
  • Acido acético (vinagre): es pediculostático al 100% pero irritante; sería útil su uso al 20-40%. 
  • Vaselina sólida: muy útil ya que ocluye los poros respiratorios del parásito. Se debe usar una vez por semana y dejarlo actuar durante 8 horas. Tiene la desventaja cosmética de engrasar el cabello.

  • Tratamiento sistémico

    El tratamiento sistémico de la pediculosis estaría reservado a los casos que por alguna causa justificada no se pueda efectuar el tratamiento local.

    TMS:  Se utilizan 80 mg de trimetoprina, 400 mg de sulfametoxasol cada 12 horas por el lapso de tres días; se puede repetir a la semana. Es pediculicida ya que actúa destruyendo las bacterias intestinales del parásito.
    Ivermectina: Actúa estimulando la liberación del GABA; este último es un inhibidor de la transmisión del impulso nervioso, lo que lleva  a la parálisis muscular del parásito. La dosis recomendada es de 200 mcg / kg por vía oral, única dosis.
     

    AUTORA: DRA. MARGARITA GIARDELLI, Secretaria del Comité de Dermatología Pediátrca de la Sociedad Argentina de Pediatría. Buenos Aires, febrero de 2000.